Cualquier crítica es siempre bienvenida

lunes, 10 de junio de 2013

I

Puede que no estuviese hecha para ti, pero puede que eso no me importase en absoluto. 
Me volvía loca por tus besos, por tu sonrisa; la misma que me hacía temblar al recordarla. 
Estaba loca por tus "buenos días preciosa", a pesar de que los recibiese no muy a menudo. 
¿Y tú? Tú sólo te dejabas llevar. De un lado al otro. Sin hacer ni decir nada por lo nuestro. Simplemente disfrutabas, no pensabas y decías las cosas como las sentías. Y aunque me duela, te felicito, porque es esa la mejor forma de evitar problemas. Problemas como enamorarse. 
Nunca lo hiciste ¿verdad? Nunca te enamoraste de mi. Y jamás lo harías, porque sabes que es lo peor. Depender de una persona es horrible, y más cuándo sabes de antemano que algún día te fallará. Pero aún así uno está ahí ¿no? Luchando para que todo salga adelante, aunque dentro de un tiempo se acabe. Porque uno sabe que cuando todo se acaba,quedan los momentos, esos que nunca se olvidan.
O quizás tú si los olvides ... no lo sé. En realidad, hay muchas cosas que aún no sé de ti. Pero ya no quiero saberlas ¿sabes?. Es más, no quiero saber nada de lo nuestro. No fue un error, pero tampoco fue un acierto. Simplemente estuvo ahí, ocupando nuestro tiempo libre, o nada más y nada menos, ocupando nuestro tiempo. 
Siempre recordaré todas y cada unas de tus palabras. Las mismas que me hacían sentir viva en las mañanas de Junio. 
Pero eso es todo lo que recordaré; momentos y palabras. Me acostumbré a quedarme con lo bueno de las cosas, lo mejor de lo mejor, y tú no lo has sido.
Adiós, "campeón".